Los cometas son pequeños cuerpos celestes compuestos de hielo, polvo y rocas que orbitan alrededor del Sol siguiendo diferentes trayectorias: elípticas, parabólicas o hiperbólicas.
Junto con los asteroides forman parte de una categoría llamada cuerpos menores del sistema solar. Su tamaño varía desde unos pocos metros a varios cientos de kilómetros.
Observación de cometas
Los cometas son unos de los astros mas agradecidos de observar, por su simpleza y plasticidad.
Los grandes cometas son observables a simple vista, al anochecer, ocupando su cola una amplia región del cielo.
Otros se pueden observar con la ayuda de telescopios astronómicos.
Y para los más débiles debemos usar telescopio.
El mejor momento para observar a los cometas es en el parihelio; cuando estan más cerca del sol, que es cuando desarrollan preciosas colas por la acción solar.
Es importante informarse de la fecha de su punto más cercano al Sol, la fecha de su máximo acercamiento a la Tierra, y conocer cuando serà visible en nuestro hemisferio.
Por tratarse de un objeto difuso debemos tener en cuenta:
Busca una ubicación libre de contaminación lumínica. Cuanto mś oscuro sea el cielo mejor podremos apreciar la cola del cometa.
Lleva contigo unos prismáticos, incluso si se espera que el cometa pueda observarse a ojo desnudo.
Descarga alguna aplicación móvil que haga seguimiento de la trayectoria de cometas, que te facilitará su localización.
Antes de la aprobación de cualquier convenio de nomenclatura sistemática, los cometas fueron nombrados en una variedad de maneras.
Aunque en el pasado se nombraron a los cometas por el año de su aparición, conforme fue avanzándose en su estudio se convino en asignarles el nombre de su descubridor,
propiciándose que fueran muchos los aficionados a la astronomía quienes se dedicarán a observar el cielo con el fin de detectar a algún cometa y así ponerle su nombre. Sin
embargo, con la invención de nuevos sistemas de detección computarizados ha hecho más sencillo su descubrimiento, se les ha asignado el nombre del observatorio o la
organización a la cual pertenece el equipo con el cual fue descubierto, como es el caso del ISON (International Scientific Optical Network).
El primer cometa en ser bautizado fue el cometa Halley (ahora conocido oficialmente como 1P/Halley), nombrado por Edmond Halley, que había calculado su órbita.
Del mismo modo, el segundo cometa periódico conocido, el cometa Encke (designado oficialmente 2P/Encke), fue nombrado por el astrónomo Johann Encke, que calculó su órbita mejor que el descubridor original del cometa, Pierre Méchain.
Lo mismo pasa con el cometa de Biela (3D/Biela)...
Los cometas más brillante (no periódicos) fueron denominados como «el gran cometa de ...», según el año en que hubiese aparecido.
En el siglo XX, la convención de nombrar los cometas según sus descubridores se convirtió en común y sigue así hoy en día.
Un cometa es nombrado después de ser avistado por sus tres primeros descubridores independientes.
En los últimos años, muchos cometas han sido descubiertos por instrumentos operados por grandes equipos de astrónomos,
y en este caso, los cometas pueden ser nombrados por el instrumento, el observatorio o la organización.
Desde 1995 la Unión Astronómica Internacional, ha designado a los cometas por un número de código que se forma tomando en cuenta si es periódico (se acerca al Sol cuando menos cada 200 años) y no periódico. Por lo que se coloca el prefijo “P/” si es periódico y “C/” si no es periódico.
Colisiones de cometas con otros cuerpos
Debido a la enorme cantidad de cometas que se acercan al Sol, es posible que en su trayectoria choquen o sean atraídos por otros cuerpos del Sistema Solar.
De echo, existe la teoría de que el agua llego a la tierra por el choque de cometas con nuestro planeta.
Especialmente, el gigante Jupiter, por su gran massa, desvia de su órbita a algunos de los cometas que se acercan al centro del Sistema Solar,
haciendo en algunos casos que por la gran atracción que ejerce se precipiten sobre su superficie.
En julio de 1994 el mundo pudo ser testigo de la espectacular colisión del cometa Shoemaker-Levy 9 con el planeta Júpiter.
Tipos de cometas
Existen dos tipos de cometas, los periódicos que tienen una órbita elíptica calculada y los no periódicos que tras su aparición no es posible determinar su órbita.
Cometas periódicos
¿Cuantos cometas periódicos se conocen?
El número de cometas periódicos conocidos es del orden de 2000, siendo el más conocido el cometa de Halley, que se acerca al Sol cada 76 años.
Los cometas periódicos reciben una numeración seguida de una letra.
La letras junto al números significan:
P = Periódico
C = No periódico
D = Desaparecido o extinguido
x = Órbita aún no calculada
A = Objeto erróneamente creído cometa pero actualmente se le considera Planeta menor
El primer cometa periódico en ser descubierto fué el Cometa Haley, descubierto el año 240 antes de cristo, por lo que lleva el número uno.
Descubrimiento: 1869 Descubridor/es: Ernst Tempel, Lewis Swift y Lincoln Near-Earth Asteroid Research (LINEAR) Periodo: 6.37 años Ultima pasada: 2020 Siguiente pasada: 2026
Descubrimiento: 1858 Descubridor/es: Horace Parnell Tuttle, Michel Giacobini y Ľubor Kresák Periodo: 5.42 años Ultima pasada: 2022 Siguiente pasada: 2028
Descubrimiento: 1896 Descubridor/es: Giacobini (Se le creyó predido y se le designó D/1896 R2) Periodo: 6.66 años Ultima pasada: 2015 Siguiente pasada: 2022
Descubrimiento: 1892 Descubridor/es: Barnard y Boattini (Se le creyó predido y se le designó D/1892 T1 (Barnard 3)) Periodo: 5.83 años Ultima pasada: 2014 Siguiente pasada: 2020
Descubrimiento: 2005 Periodo: 4.42 años Ultima pasada: 2014 Siguiente pasada: 2018
Familias de cometas según su órbita
Podemos distinguir dos tipos de cometas según el periodo de su orbita:
Cometas de período corto
Son aquellos generalmente provenientes del Cinturón de Kuiper, ubicado a 50 Unidades Astronómicas (UA) del Sol.
Cometas de período largo
Son aquellos que provienen de la Nube de Oort, casi cien veces más lejos, en los límites mismos del Sistema solar.
Cometas de órbita de periodo corto
Se consideran cometas de periodo corto aquellos con un período de menos de 200 años. Orbitan en un plano parecido al de la eclíptica y en la misma dirección que los planetas.
El caso más extremo de órbita de período corto, es el cometa Encke, que tiene una órbita que no alcanza la órbita de Júpiter, y se conoce cómo un cometa tipo Encke.
Los cometas de corto período con períodos orbitales menores de 20 años y bajas inclinaciones (hasta 30 grados) hacia la eclíptica se llaman cometas de la familia de Júpiter (JFCs) o cometas Jovianos.
Aquellos como el cometa Halley, con períodos orbitales de entre 20 y 200 años e inclinaciones que se extienden de cero a más de 90 grados, se llaman cometas tipo Halley (HTCs)
Cometas con órbita de periodo largo
Los cometas de período largo tienen órbitas muy excéntricas y períodos que van desde 200 años hasta miles de años. Pueden llegar a tener una excentricidad mayor que 1 cuando se encuentra cerca del perihelio, pero ello no significa necesariamente que un cometa abandone el Sistema Solar.
Cometas no periódicos
Un cometa no periódico (o cometa de período largo) es un cometa que no ha sido confirmado por la observación de varios pasos de perihelio.
En la práctica, los cometas no periódicos tienen un período orbital de más de 200 años. Esto incluye los cometas que atraviesan el sistema solar interior una sola vez.
Los cometas no periódicos se encuentran en órbitas casi parabólicas y no regresarán hasta pasados cientos o miles de años, si es que lo hacen.
Algunos autores reservan el término de cometa no periódico para los cometas que nunca volverán a la proximidad del Sol.
Algunos ejemplos de cometas que no se espera que regresen al Sistema Solar son C/1980 E1 (Bowell), C/2000 U5 (LINEAR), C/2001 Q4 (NEAT), C/2009 R1 (McNaught), C/1956 R1 (Arend-Roland) y C/2007 F1 (LONEOS).
Los nombres oficiales de los cometas no periódicos empiezan por "C"; los cometas perdidos o extinguidos tienen nombres que empiezan por "D".
Partes de un cometa
Los núcleos de los cometas están compuestos de una mezcla de granos no volatiles y gases, congelados por el frio espacial. Pueden ser descritos cómo "bolas de nieve sucias".
Cuando se acerca al Sol el calor solar provoca que las capas exteriores heladas del núcleo se evaporen. Durante este proceso, el polvo y los gases que forman la coma alrededor del núcleo son liberados.
Cuando el cometa se acerca al Sol, la coma crece. El viento solar empuja el polvo y los gases de la coma provocando que se liberen al espacio formando la cola del cometa. El viento solar hace que la cola del cometa apunte hacia afuera del Sol. ¡Las colas de los cometas pueden alcanzar unos 150 millones de kilómetros de largo!
Cada vez que los cometas pasan cerca del Sol, pierden parte de su materia. Con el tiempo, se romperán y dispersarán completamente.
Los cometas más famosos de la historia
A lo largo de la historia algunos cometas han sido muy famosos por su brillo y espectacularidad. Son los llamados grandes cometas.
Cometa de César
Fue el más conocido de la antigüedad. Sus siete días de permanencia en el firmamento fueron interpretados por los romanos como señal de la identificación del dictador asesinado poco tiempo antes, Julio César. Se dice de él que puede haber sido el cometa más brillante del que haya registros históricos.
Cometa Halley
El astrónomo inglés Edmund Halley pronosticó en 1705 la aparición del cometa visto en 1531, 1607 y 1682 de nuevo en 1758.
Efectivamente el cometa se pudo ver en la fecha indicada, pero Haley no pudo comprobarlo porque murió antes.
Tras su muerte se le puso su nombre al cometa.
El cometa tiene un período de 76 años. La última vez que se le vio fue en 1986 y está previsto que vuelva a hacerlo en 2061.
Cometa Coggia
Fue descubierto por el astrónomo francés Jérôme Eugène Coggia el 17 de abril de 1874. El 9 de julio del mismo año hizo el paso por el perihelio.
Fue también realmente brillante y se vio desde junio hasta el mes de agosto del mismo año. Presentó dos largas colas que se extendían más de 60 grados a través del cielo.
Gran Cometa de 1882
Fue un cometa que se pudo observar por su gran brillo en el cielo diurno en septiembre de 1882, que formaba parte de los Kreutz Sungrazers, una familia de cometas que pasan muy cerca de la superficie del sol durante el perihelio.
Cometa West 1976
Fue descubierto mediante fotografías por el astrónomo danés Richard M. West, del European Southern Observatory, el 10 de agosto de 1975 y llegó a su máximo brillo en marzo de 1976. Cuando pasó a 29.5 millones de kilómetros del Sol el 25 de febrero.
Curiosamente después del anuncio en prensa que se hizo por el cometa Kohoutek, que acabó decepcionando las expectativas, el cometa West tuvo poco eco fuera de la comunidad astronómica y no tuvo apenas repercusión pública.
Según indicaron los observadores de la época, su máximo brillo era tal que se podía estudiar durante el día.
El periodo orbital del cometa está estimado en unos 558 000 años.
Cometa Ikeya-Seki 1965
Fue descubierto independientemente por los astrónomos aficionados Kaoru Ikeya y Tsutomu Seki, con unos 15 minutos de diferencia de uno a otro, el 18 de septiembre de 1965.
Dicen que fue el más brillante del siglo XX y se descubrió un mes antes de su perihelio, que es cuando alcanza su punto más cercano al Sol.
Shoemaker-Levy 9
El cometa fué descubierto en 1993 por los astrónomos David Levy y Carolyn y Eugene M. Shoemaker cuando orbitaba Júpiter.
En julio de 1994, el cometa Shoemaker-Levy 9 (SL9) impactó en Júpiter y dejó gigantescas cicatrices oscuras en la atmósfera del planeta. Fue la primera observación directa de una colisión extraterrestre en el Sistema Solar.
Cometa Hale-Bopp
Fue realmente observado durante el siglo XX y uno de los más brillantes. Se vio durante 18 meses y se descubrió el 23 de julio de 1995 a gran distancia del Sol. Gracias a este brillo se llamó Gran Cometa de 1997.
Wild 2
El 2 de enero de 2004 la sonda Startdust de la NASA recogió partículas de polvo de la cola del cometa Wild 2 y las trajo de vuelta a la Tierra.
Tempel 1
Es un cometa periódico sobre el que se lanzó la misión "Deep Impact" en 2005.
Se trataba de lanzar un proyectil contra el poco brillante cometa Tempel 1 para estudiar la composición interna del núcleo del cometa.